El psicodrama grupal. El psicodrama en la terapia de grupo no se reduce solo a la formación. Es de destacar su versatilidad en ejercicios catárticos, expresivos, explorativos, descriptivos, lúdicos y de diagnostico. Es una herramienta útil y efectiva de trabajo. 

Jacobo Levy Moreno, el precursor del psicodrama lo define como el hecho de representar la propia vida en una escena psicodramática. Puede estar más o menos diagramado pero su base es la improvisación.

FASES DEL PSICODRAMA

Según las diferentes metodologías, el psicodrama puede constar de varias fases. La mayoría se basan en el psicodrama clásico de Moreno y consta de tres: preparación o caldeamiento, dramatización o escena, y comentario grupal o compartir. (J.L.Moreno, Rojas Bermúdez, y otros.) Es en la dramatización donde se “representa” el problema, sea de forma descriptiva, demostrativa, expresiva u otras. También puede introducirse en la representación el uso de elementos: títeres, muñecos, telas, utilería diversa, etc. La fase de caldeamiento crea el clima necesario para que la terapia se desarrolle con confianza. Es donde se prepara lo que se va a representar. En la fase de compartir el protagonista explica como se ha sentido y el grupo expresa sus puntos de vista. Esta última es transcendental para el desarrollo terapéutico.

La base de su metodología es la improvisación y la creatividad. Tambien el movimiento, el gesto, la intrínseca preparación grupal, y la escenificación teatral.

Además, es importante destacar el término del Yo-auxiliar en el psicodrama de Moreno. Este hace referencia a la elección que realiza el protagonista entre sus compañeros para que desarrolle una parte de la representación psicodrámatica. Este Yo cumplirá distintas funciones. 1. Como actor representado un papel. 2. Guía terapéutico. 3. Investigador social.

El consciente y el inconsciente

NUESTRO PSICODRAMA

En nuestro caso, la metodología converge con otro tipo de propuestas y tienen dos vertientes. En la primera los ejercicios son ficticios, abiertos, descriptivos. reflexivos. con papeles diferentes a los reales de cada persona. Es más cercano al juego dramático de los niños, o al trabajo actoral. Aclaremos que no son actores y las diferencias son claras respecto a un actor/iz profesional, (aquellos  fingen, utilizan técnicas corporales, psicodramáticas y ortofónicas)

En la segunda es más cercano a la definición de Moreno, donde se involucran en sus propias vidas, sus traumas y sus vivencias, Utilizamos el soliloquio, el cambio de papeles, el espejo, esculturas, y otras técnicas que son más propias del “psicodrama bipersonal”, El psicodrama bipersonal no utiliza el yo-auxiliar, y esta variante se define por la relación que se establece entre paciente y terapeuta, Adaptamos estas técnicas bipersonales al grupo, creando una atmosfera que a veces es intimista, y otras se mezclan con diferentes ejercicios catárticos, físicos y emocionales. En estos últimos es normal utilizar percusión, y diferentes estímulos sonoros.

Aunque sigue habiendo dudas en su evidencia científica en cuanto a la efectividad, se constata  que el Psicodrama es un modelo psicoterapéutico efectivo en los trastornos de personalidad dependientes, evitativos, narcisistas, límite, etc. En más 30 años de investigación en terapia grupal, hemos sido testigos de beneficios  visibles y cuantificables, aparte de los ya mencionados de personalidad, en los trastornos depresivos, en traumas, baja autoestima, problemas  relación, trastornos obsesivos compulsivos y estrés postraumático.

Estamos de acuerdo con todos aquellos profesionales que reconocen que su mayor beneficio es: adaptarse a las necesidades y problemas de cada paciente.

José Carlos Vázquez Calvo col. nº M-17265